Retener los mejores talentos a lo interno de las empresas se ha convertido en un reto en la República Dominicana, por lo que Eduardo Valcárcel, managing partner de Newlink en el país, advierte que, si no trabajan en el tema, se enfrentarán a una rotación inmensa en términos de personal, lo que afecta la productividad de la organización.
“El mundo ha cambiado tanto que las prioridades de estos talentos, de estas personas, de estos empleados han cambiado completamente y ya no basta solamente con un tema salario, un seguro y una oficina. Necesitas trabajar nuevas políticas, nuevos lineamientos para poder tener éxito”, indicó Valcárcel.
Además, enfrentan a no tener “gente contenta contigo”, por lo que prefiere “que mis colaboradores sean personas que estén entusiastas y que brinde un mejor servicio y que trabajen de una manera más alineada”.
Reiteró que la rotación de personal afecta la productividad porque hay que dedicar constantemente tiempo para entrenar a los de nuevo ingreso.
“Si tú no logras hacer de un sitio que atraiga, que sea de un imán para atraer a estas personas, son gentes que se van a ir a otros sectores o a la competencia”, señaló.
También dijo que, si una empresa quiere que desde las universidades la vean como el sitio donde quiero ir a trabajar, se necesita saber cómo piensa hoy la fuerza laboral, qué prioridades tienen, cómo lo alineo, cómo lo incursiono a mi cultura, cómo hago una cultura de crecimiento y de meritocracia.
- “Es tan relevante como la comunicación que hacemos hacia fuera o la comunicación que hacemos hacia dentro”, apuntó el Managing Partner de Newlink Dominicana.
Valcárcel habló en el marco del lanzamiento de “A New Culture“, una actividad organizada por Newlink Dominicana por su vigésimo aniversario.
En la actividad también participó Cristina Salvador, fundadora de Both, People & Comms, quien señaló que hoy en día es esencial fidelizar el talento en las organizaciones, ya que está directamente vinculado con la productividad y la competitividad de las empresas.
“Necesitamos que los colaboradores estén comprometidos con aquello que hacen. Desde el grupo Newlink impulsamos lo que es el propósito compartido: conectar a las personas con un propósito, una causa mayor que la suya propia para alinear los equipos en un objetivo común”, explicó Salvador.
En ese sentido, la profesional señaló que trabajar el engagement nos permite mejorar productividad, reducir ausentismo y disminuir también la rotación.
- El “engagement” se refiere al nivel de compromiso, participación y conexión emocional que una persona tiene con una marca, una organización, una comunidad o incluso otra persona.
- Cuanto mayor sea el engagement, más involucradas están las personas con la marca o el contenido, lo que puede traducirse en lealtad, recomendaciones positivas y, en última instancia, en beneficios.
“El objetivo de una organización es conseguir que sus colaboradores sientan que pertenecen desde la voluntad, desde la confianza, desde la autonomía y la flexibilidad”, precisó.
La sociedad va muy rápido
En todo este cambio de paradigmas, las universidades deben estar en constantes cambios para cumplir con las exigencias de las nuevas generaciones.
Por ejemplo: la irrupción de la Generación Z, que personas jóvenes con una exigencia profunda de que las empresas conecten con propósito, con causa, que trabajen más la escucha y que les permitan influir y desarrollarse y todo eso ha ido muy muy rápido.
“Tras la pandemia ha habido cambios muy acelerados y claramente las empresas y las universidades necesitan ponerse a ese nivel, y para eso es importantísimo trabajar en la evolución cultural, en cómo acompañamos a las organizaciones a ponerse al día y a conectar con las generaciones del futuro y a conectar con las tendencias sociales que existen hoy”, dijo Salvador.
La transformación cultural se trata de afinar el pensamiento colectivo, las metas y una nueva manera de trabajar dentro de las organizaciones.
Esto resulta indispensable porque las compañías deben estar cohesionadas —con diálogo y entendimiento genuinos— para dar una solución real a retos como la retención del talento, la reputación, la comunicación interna, las diferencias generacionales, la equidad y la inclusión.
“Se habla de que casi un 70 % de los proyectos de transformación no triunfan porque no se toma en cuenta la parte humana. Por tanto, invertir en las personas al hacer una transformación cultural es la inversión más rentable que puede hacer una organización”, expresó Salvador, fundadora de la Asociación de Comunicación Interna Española.
Tendencias globales
Doina Hernández, senior account manager para Newlink Dominicana, destacó la importancia de que el sector productivo nacional tome notas de las tendencias globales y se prepare para ellas.
- “No podemos seguir gestionando el sector productivo de una manera tradicional, cuando el país nos demanda ser más competitivos”, explicó la especialista.
Uno de esos elementos, de acuerdo a Hernández, es asegurar el bienestar integral en la organización. De esa manera “tendremos equipos que se saben acogidos, aumentamos el pensamiento creativo y gozamos de una capacidad de adaptación indispensable en tiempos de tanta competencia”.
Entre los participantes en los paneles del evento, estuvo el ministro de Trabajo, Luis Miguel De Camps. El funcionario subrayó la importancia de que los sectores público y privado ofrezcan, cada vez más, espacios y condiciones para el diálogo, la participación y la inclusión de los trabajadores.
A juicio de De Camps, prácticas en esta dirección modernizan el mercado laboral dominicano y lo hacen más competitivo de cara a la realidad latinoamericana.