EL NUEVO DIARIO, LONDRES.- El primer ministro británico, el laborista Keir Starmer, nombró este viernes a Heidi Alexander ministra de Transporte en sustitución de Louise Haigh, que dimitió tras conocerse que en 2014 admitió un delito de falso testimonio a la Policía en relación con el supuesto robo de su móvil de trabajo.
Alexander, que es diputada por la circunscripción inglesa de Swindon South, asumirá las riendas de una cartera que, entre otras cosas, se ocupa de la renacionalización de los ferrocarriles en el Reino Unido, una de las políticas insignia del Gobierno laborista.
Haigh, que fue elegida diputada en 2015 y previamente trabajaba para la aseguradora Aviva, dejó el cargo después de que el jueves Sky News y ‘The Times’ publicaran que en 2014 se había declarado culpable ante la Justicia de haber testificado incorrectamente ante la Policía en 2013 que le habían robado en un atraco el móvil, que después encontró aunque no lo comunicó.
En su carta de dimisión a Starmer, dijo que, pese a que lo ocurrido fue «un error» que se resolvió sin que fuera penalizada por el tribunal, no quiere que suponga una distracción en la labor del Ejecutivo.
Haigh aseguró que sigue comprometida con el proyecto laborista y lo apoyará como diputada en la Cámara de los Comunes.
En su respuesta, el primer ministro le agradeció su trabajo para «llevar a cabo la ambiciosa agenda de transporte de este Gobierno» y afirmó que la joven de 37 años «aún podrá hacer una gran contribución en el futuro».
Esta dimisión es la primera de un ministro de este Gobierno desde que el Partido Laborista llegó al poder tras ganar por mayoría absoluta las elecciones del 4 de julio, que pusieron fin a 14 años de mandato conservador.