La economía naranja–denominada así al conjunto de actividades que generan valor agregado a través de la creatividad, el conocimiento y la cultura– expande cada vez más su potencial exportador en la República Dominicana, atrayendo así el interés de la banca en apoyar financieramente a los emprendedores de este segmento productivo.
Entre el 2020 y el 2024, las exportaciones de servicios modernos, una actividad que engloba las actividades vinculadas a las tecnologías de la información y a la creatividad, alcanzaron los 6,200 millones de dólares en ese período, aseguró la directora ejecutiva del Centro de Exportación e Inversión de la República Dominicana, Biviana Riveiro.
Solo en el 2023, estas exportaciones fueron de 1,806 millones de dólares, para un crecimiento de un 125 % más con respecto al 2019, precisó el ministro de Industria, Comercio y Mipymes, Víctor Bisonó, en el marco del Foro Caribe Naranja 2024, un evento que reunió a artistas, emprendedores, funcionarios y personalidades internacionales para debatir el potencial de las industrias creativas en el país.
A esto se le suman las exportaciones de los bienes creativos –una clasificación de la Oficina Nacional de Derechos de Autor (ONDA) que abarca los productos generados por las industrias creativas–, que alcanzaron los 1,600 millones de dólares en el último cuatrienio.
Esto es un alza de 38 % respecto al cuatrienio 2016-2020, de acuerdo a ProDominicana.
Riveiro indicó que estas cifras son “mucho menores” a la realidad de lo que está pasando en la República Dominicana, dado que este es un sector en el que, por tener una naturaleza intangible y generarse muchas veces de manera informal, se hace “difícil” cuantificar su valor real.
Su peso en la economía dominicana
Iván Duque, expresidente de Colombia y un conocido propulsor de la economía naranja en su país y en América Latina, indicó que la economía naranja en la República Dominicana representa un 2 % de su producto interno bruto (PIB).
De esta manera, la economía naranja supera en ocho puntos porcentuales el 1.2 % que representa la industria tabacalera, uno de los principales productos agrícolas y culturales del país.
“Si la economía naranja es tan importante, tan diferencial en nuestros países (…), entendemos que la República Dominicana es, en sí misma, una potencia cultural en expansión”, manifestó Duque durante su conferencia magistral “Economía naranja en la era de la inteligencia artificial”.
A modo de ejemplo de este potencial, Duque resaltó que solo la gira “Entre mares y palmeras”, del cantautor Juan Luis Guerra, ha generado más de 15 millones de dólares en divisas, mientras que las colecciones bajo la marca del diseñador dominicano, Óscar de la Renta, generan alrededor de 150 millones de dólares cada año.
“Estamos hablando de solo dos casos icónicos muy reconocidos de República Dominicana”, subrayó.
Indicó que la economía creativa es capaz de integrar el patrimonio arqueológico y nacional de la nación, a través de actividades como:
- Los carnavales
- Centros arqueológicos
- Museos
- Lugares patrimoniales
- Artes escénicas y visuales
- Artes digitales
- Animación digital
- Fotografía
- La creación de contenidos a través de los medios de comunicación masivos
- El diseño
- La publicidad
- La educación creativa
- La gastronomía
Explicó que todas estas actividades, puestas en sinergia muestran que América Latina cuenta con un “motor transformador” en la economía naranja y que, en el caso de Quisqueya, se puede combinar de manera potencial con la industria turística, generando “un matrimonio perfecto” entre la cultura y el turismo.
Duque recomendó a las autoridades dominicanas en promover la economía naranja como una estrategia nacional y no reducirla únicamente al presupuesto que maneja el Ministerio de Cultura. Propuso una estrategia sustentada en ocho factores clave: Información, instituciones, infraestructura cultural, infraestructura digital, industria, integración, inclusión e inspiración.
El apoyo de la banca
La banca dominicana ha jugado un rol importante para impulsar el crecimiento de la economía naranja, tanto en el auspicio y promoción de eventos artísticos y culturales, como para ofrecer su apoyo financiero a nuevos emprendedores.
Solo en el cine, una de las industrias creativas más pujantes del país, el BHD ha apoyado a más de 80 proyectos cinematográficos desde el 2012 hasta la fecha, representando una inversión de más de 1,195 millones de pesos en películas, que han sido presentadas fuera del país, destacó la segunda vicepresidenta de Comunicación Corporativa del banco, Alicia Puello, en el marco del evento.
Lo propio ha hecho el Banco Popular Dominicano, que ha financiado proyectos de la industria cinematográfica valorados en 2,000 millones de pesos en los últimos años, declaró a este medio su vicepresidente del Área de Comunicación y Reputación, Luis Esteban Martínez-Murga, quien resaltó el rol de la entidad financiera en el apoyo de las empresas de postproducción cinematográfica, un sector exportador que atiende producciones de Hollywood desde la República Dominicana.
De igual manera, destacó que el banco cuenta con la plataforma Emprendedores Naranja, –que proporciona herramientas para ayudar a los emprendedores a formular sus proyectos como negocios viables–, así como la plataforma Impulsa Popular –para empresas más formalizadas y con acceso a múltiples recursos para todo tipo de pymes, incluyendo las pymes naranjas–.
En lo que respecta al Banco de Reservas, esta entidad destina más de 100 millones de pesos al año en el patrocinio de actividades culturales y creativas, destacó la vicepresidenta de Mercadeo de la entidad financiera, Yubelkis Ramírez Viñas, a Diario Libre.
“Estamos haciendo grandes esfuerzos para apoyar, desde diferentes áreas del banco”, manifestó, destacando el apoyo a las industrias creativas desde los departamentos de Negocios Internacionales y de Turismo.
Recordó que Banreservas cuenta con un presupuesto para su Centro Cultural –el primero de su clase de una entidad financiera–, dedicado a impulsar la industria cultura y creativa.