En la celebración del Foro sobre Movilidad Urbana, la Universidad Nacional Pedro Henríquez Ureña (UNPHU) propuso el diseño de un “Plan Metropolitano de Desarrollo Urbano”, que incorpore los diferentes planes sustentados, de manera coordinada, gestionados y monitoreados desde una gobernanza con alcance supramunicipal.
Para dar seguimiento y evaluar este plan, sugiere además que el Gobierno conforme un “Gabinete Urbano” a fin de aglutinar las diferentes instancias de gobernanza que se superponen unas sobre otras.
Así lo expuso el rector de la academia, el arquitecto Miguel Fiallo Calderón, sustentando la necesidad de la creación de este plan en que el principal centro urbano del país, aloja cerca de cinco millones de habitantes cualquier día de trabajo, por lo que siempre está sometida a una demanda creciente de servicios urbanos que se manifiesta en el crecimiento descontrolado de la mancha urbana, la desorganización sistémica del tránsito y la falla de las infraestructuras de servicio.
“Primero, el crecimiento descontrolado de la mancha urbana, que en los últimos años ha tenido una tasa de crecimiento de casi nueve millones de metros cuadrados por año, evidenciando el fenómeno de que la urbanización y el consumo de suelo crece más rápidamente que la población”, manifestó Fiallo.
Seguidamente, enfatizó en la falla sistémica de las infraestructuras urbanas de servicio, asociadas al espacio público, calles, infraestructura peatonal así como el agua, los residuos sólidos y otros que interactúan en los procesos de uso y consumo humano como otra de las situaciones para entender la base de un plan como el que sugiere.
“Una muestra de esto último son las inundaciones que se han venido sucediendo en los últimos años, con los correspondientes colapsos del tránsito”, ejemplificó el rector de la UNPHU.
Asimismo, precisó como otro de los fenómenos la desorganización sistemática del tránsito existente, producto de la imposibilidad de lograr un sistema integrado de transporte público eficiente y seguro, además del aumento descontrolado del parque vehicular.
“La manera limitada y tradicional de abordar estas fallas sistémicas que se acumulan por décadas, son el producto de planes particulares, fragmentados y muchos de ellos ajenos al interés común, o erróneos en su concepción; obviando que se debe partir inevitablemente de la construcción de una visión de ciudad avalada por un Plan Metropolitano de Desarrollo Urbano”, expresó Fiallo.
No obstante, aseguró que hay muchas acciones que se pueden ir tomando a corto y mediano plazo.
Abordaje integral
“Los principales desafíos en materia de movilidad identificados a partir de los mecanismos académicos de la universidad, orientan la necesidad de abordar el sistema de movilidad de manera integral, multiescalar, transdisciplinario desde la gestión, la planificación territorial, los proyectos de infraestructura urbana, el aspecto financiero y operacional”, dijo la urbanista Mizooky Mota, al participar en el “Panel del Diagnóstico de la Situación Actual y Planes en Marcha”, cuya coordinación estuvo a cargo del ingeniero Erick González.
La arquitecta Mota expuso que la academia lleva a cabo una serie trabajos con miras a aportar a la solución del problema de movilidad urbana latente en el país.
La UNPHU desarrolla un “Código Urbano”, consistente en una serie de codificaciones de acuerdo a los tipos de vías (principales, secundarias, terciarias), cruces peatonales, carriles de vehículos (motorizados, transporte público, ciclovía) mostrando cuáles elementos se necesitan adicionar, cambiar o quitar para mejorar la movilidad.
“Hicimos un ejercicio con el sector Ensanche la Fe y mapeamos algunas soluciones donde se podía tensificar algunas zonas de la ciudad, cambiar algunos usos, mejorar cómo la gente se mueve y aplicando ese código, empezar a hacer un tratamiento, tanto de calles como de la relación de los edificios hacia el peatón”, explicó la especialista Mota.
También están realizando proyectos de investigación científica, como uno para la “determinación del potencial de la infraestructura verde como herramienta de adaptación al cambio climático en el Distrito Nacional”, mediante el cual se pretende determinar las medidas de adaptación al cambio climático a través de la infraestructura verde y evaluar estrategias para la normativa del arbolado urbano del Distrito Nacional y la valoración económica del mismo.
También han creado una mesa abierta, llamada “Mesa Metropolitana de Arquitectura y Urbanismo UNPHU”, que congrega a egresados, docentes y especialistas del área. Recientemente, fruto de las discusiones, la mesa reveló varias propuestas, como la implementación de la planificación y gestión de la avenida Circunvalación para que descongestione la presión del centro de la ciudad, con énfasis al transporte de carga. Otra sobre subsidios a los pasajeros regulares del transporte público para incentivar el uso y la participación de mayores usuarios y la creación de los reglamentos de la Ley 63-17, que actualmente ha dado mayor énfasis a la fiscalización que a la educación y formación de los ciudadanos, así como de los agentes de tránsito.
También la academia trabaja una propuesta de creación de un “Observatorio Metropolitano”, que monitoree, analice y evalúe las dinámicas territoriales que suceden constantemente.
De acuerdo con Mota, el observatorio pretende desplegar herramientas tecnológicas, como la utilización de imágenes satelitales, levantamiento con drones, análisis de datos geoespaciales, entre otras, que producirá indicadores urbanos, estudios y asistencia técnica, evaluación y monitoreo de instrumentos de gestión y mapas y análisis de datos geoespaciales.
Sin embargo, dejó claro que se necesita de alianzas público-privadas para que el observatorio pueda crecer de manera sostenida, los incentivos financieros para el desarrollo de tecnología y la transferencia de data de acceso libre que las instituciones producen, que para los investigadores son importantes.